Resultados finales del concurso fotográfico. La fotografía "El círculo de la vida" gana la tercera edición.

El 29 de septiembre se clausuró la tercera edición del festival comunitario con la ceremonia de entrega de premios a las fotografías ganadoras del concurso dedicado al tema "principio y fin". Los tres premios del jurado y el premio especial del jurado popular (fotografía más votada por el público) se entregaron en presencia de los ganadores, todos residentes en la península y conectados a distancia por videoconferencia.

La fotografía más votada, con más de 2.000 votos, fue la de Leandro Piccini, "Azafranes en flor", que capta "el final de la nieve y el comienzo de la primavera".

El jurado concedió el tercer premio a Elisa Bresciani por su fotografía "Las estaciones del sentimiento", descrita por la autora del siguiente modo: "Saludaba el principio y el final de un año visitando el gran roble que hay cerca de mi casa. El principio y el final de un estado de ánimo coincidían con el de la estación". La obra es un fotomontaje de dos autorretratos: para mí era necesario representar el tema".

El jurado concedió el tercer premio con esta motivación: "El uso de la técnica de la doble exposición consigue enfocar bien el tema, expresándolo con corrección formal y eficacia".

 

El segundo puesto fue para Emanuela Baioni por la toma "Nos vemos": "No es una despedida, sino un hasta luego. Se ha recorrido el camino, se ha escalado y ahora el sujeto puede por fin sumergirse en la luz y la libertad del mar...".

El jurado concedió el segundo premio con esta motivación: "En una atmósfera expresionista, emerge la adhesión al tema, representado con un hábil uso del silueta y centrándose en los elementos formales que realzan el valor de la foto".

 

El ganador de la tercera edición del concurso de fotografía es Cristiano Zingale con la fotografía "El círculo de la vida", tomada -según describe el autor- durante el Camino de Santiago: "Se suele recomendar llevar una mochila ligera para poder afrontar la caminata, sólo mi cámara y objetivos pesaban 2,5 kg. Precisamente por eso hice muy pocas fotos, era mucho esfuerzo sacarla de la mochila y captar algunos instantes. El instante de esta foto fue una de las pocas veces en que, a pesar del cansancio, hice el esfuerzo: fue emblemática para mí la imagen de esta niña jugando de la manera más absoluta y pacífica entre estas lápidas.

El jurado concedió el primer premio con esta motivación: "Notable capacidad para plasmar eficazmente el tema a través de una composición limpia y precisa. Capta el momento con una mirada original, reforzada por un buen uso del blanco y negro".